Los escáneres IP detectan dispositivos en la red.
Un escáner de IP te ayuda a encontrar dispositivos en tu red. Revisa muchas direcciones rápido y muestra lo que está en línea. Esto importa porque ves si teléfonos, computadoras, cámaras o impresoras están conectados, y también si hay aparatos desconocidos. Con un escaneo simple ves nombres, IP y a veces la marca. Así ahorras tiempo al configurar el Wi‑Fi, arreglar lentitud o planear routers y cables.
Primero conecta tu computadora a la misma red Wi‑Fi o por cable que quieres revisar. Abre el escáner de IP, elige el rango local y presiona escanear. La app probará cada dirección y juntará resultados. Cuando veas la lista, marca tus equipos conocidos como de confianza. Si algo se ve raro, toca para ver datos como MAC y proveedor. Escanea de nuevo después de cambios para ver si el equipo sigue o desaparece.
Sí, un escaneo muestra cuántos equipos comparten tu red. Si son muchos, la velocidad baja, sobre todo en videollamadas o juegos. Puedes pausar descargas, apagar aparatos inactivos o mover tareas pesadas a la noche. Si un equipo desconocido usa datos, cambia la contraseña del Wi‑Fi y activa seguridad fuerte como WPA3. Luego escanea otra vez para confirmar que solo quedan tus equipos de confianza.
Es seguro cuando escaneas tu casa u oficina. La herramienta solo pregunta si los equipos están allí y toma datos públicos. No abre archivos ni cambia ajustes. Aun así, evita escanear redes que no son tuyas. En lugares compartidos como escuela o trabajo, pide permiso al adulto o al administrador. Mantén el escáner actualizado y respeta las reglas para que todos estén seguros.
Escanea cuando agregues equipos, cambies el router o notes lentitud. Un escaneo semanal es un buen hábito en hogares ocupados. Mantiene fresca la lista y te ayuda a detectar sorpresas. Si viajas, al volver escanea y actualiza nombres para que tus registros queden limpios. En oficinas pequeñas, guarda un reporte mensual, útil para llamadas de soporte.
Mantén la calma y verifica dos veces. Podría ser un equipo conocido con nombre nuevo tras una actualización. Apaga el Wi‑Fi de tus aparatos uno por uno y mira cuál elemento desaparece de la lista. Si de verdad es desconocido, cambia la contraseña del Wi‑Fi y reinicia el router. Usa una frase segura y desactiva redes de invitado viejas. Después, escanea de nuevo para confirmar que ya no está.
Un escáner IP es una herramienta que recorre la red para hallar dispositivos activos y puertos abiertos. Envía pequeñas sondas a cada dirección y espera respuestas. Su lista muestra hosts, impresoras y cámaras, y detecta equipos desconocidos de riesgo.
Ingresa la subred como 192.168.1.0/24, elige ping y escaneo de puertos y comienza. Deja que el escáner IP termine su pasada. Ordena por tiempo de respuesta para ver hosts cercanos. Guarda los resultados para comparar después y ver altas o bajas.
Útiles: ping ICMP para hosts activos, conexión TCP para servicios abiertos y escaneo ARP en red local. Un escaneo rápido de puertos comunes revisa servicios típicos. Elige solo lo necesario para resultados claros y rápidos.
Algunos equipos bloquean ping o duermen para ahorrar energía, así que no responden. Un firewall también puede dejar caer sondas. Prueba escaneos TCP en puertos comunes, despierta el equipo o escanea en horario laboral. Usa ARP y ping para subir el acierto.
En muchas herramientas los resultados están en la tabla principal y pueden guardarse como CSV, JSON o HTML. Busca el menú Guardar o Exportar. Elige una carpeta fácil de hallar después. Un archivo con fecha ayuda a comparar escaneos y cambios de IP y puertos.
En redes muy activas, haz un escaneo completo semanal y uno rápido de puertos comunes a diario. Tras cambios grandes, vuelve a escanear para actualizar la lista. Programa el escaneo en la herramienta. Los escaneos regulares mantienen el inventario y detectan puertos de riesgo pronto.